Las predicciones.
Tres principales pasos son necesarios en una consulta de ifá. El primero es la salida del signo correcto asociado con el mensaje que ifá quiere hacer llegar al cliente. Esto se consigue con la manipulación de los inkines (atefar), o con el opele, y son interpretados en termino de la ley de las probabilidades donde cada signo tiene una oportunidad en 256 de salir. La consulta que le hace el Babalawo a su cliente, no es escogido, referente al signo que le salga, ya que es ifá o esu quienes determinan el signo que deberá ajustarse a su problema o necesidad el signo inicial (toyale) es el que determina las historias que deben ser contadas.
Segundo, la historia correcta que refleja el problema del cliente debe ser escogido por el adivino como una muestra de su ashe, de entre todas las historias que pueda memorizar del signo. La historia ideal con la variedad de problemas que pudiera confrontar el cliente incluyen: enfermedades, la muerte, desenvolvimiento, deudas, querer casarse y tener hijos, adquirir terreno para construir una casa ser escogido para una jefatura o adquirir un titulo, prosperar en los negocios, hacer un viaje, recobrar una propiedad perdida etc. La historia indica el ebbo o sacrificio que debe hacerse, también si debe modificarse algo y dice la causa del problema por lo que ha venido el cliente a consultarse. La historia es la llave de entrada al sistema de adivinación, y la selección de la historia correcta, contiene el mensaje que ifá da al cliente en el punto crucial de su proceso.
Finalmente es necesario para el cliente hacer ebbo o sacrificio que se le indica, ya sea para asegurar una bendición o para evitar una mala consecuencia que pudiera acarrearle. No es necesario para el adivino saber el problema del cliente, ya que el tiene derecho de ocultar sus problemas al adivino. El puede preguntar a ifá a través del opele o ikin en voz baja lo que desee saber, antes de proceder al tiro, el se llevara pegado a los labios y le murmurara sus deseos, al ibo y ota que se utiliza en la consulta para saber si es si o no. El adivino tocara con el ibo y el ota los dos terminales del opele, o lo meterá dentro de los inkines y preguntara:
«Ifá, usted oyo lo que quiere saber fulano de tal».
Informantes de Ife están de acuerdo en que la experiencia del adivino le da un entendimiento especial de los problemas humanos. Herskovits (1938) dice sobre la posición del adivino en Dahomey: debe haber una completa franqueza entre el cliente y el adivino, para poder a través de los datos llegar a una conclusión y clarificar el aviso o mensaje de ifá sobre el problema del cliente. Dice que es erróneo que el adivino siquiera conozca la naturaleza del problema,porque puede ser tentado a mentir para satisfacer al cliente, y falsear la historia sobre el problema o recitar una historia que no corresponde al signo y el cliente no reciba el mensaje correcto de ifá.
En Ife mantienen que un buen adivino no necesita saber sobre los asuntos personales de sus clientes, como hacen algunos adivinos inescrupulosos.
El araba de Igana dice, que después que la historia correcta ha sido aplicada, el adivino demuestra su conocimiento al cliente diciéndole cual es el asunto que lo trajo a consultarse. Actualmente es el mismo cliente que selecciona la historia, ya que el adivino simplemente recita las historias que el ha memorizado del signo inicial, cuando el cliente es el que le viene bien a su problema se lo indica al adivino, y entonces el marca el ebo que es de esta historia siempre preguntándole a Ifá.
Esto no quiere decir que los adivinadores o charlatanes o que el sistema entero sea un fraude, como algunos europeos e incluso africanos han llegado a concluir algunas veces, quiere decir, que la adivinación de Ifá es esencialmente una técnica proyectiva, comparable al rorschach test, en el que su interpretación depende de las motivaciones y otros factores sicológicos del cliente, como dice rene ribeiro (1956). Este paralelismo es reconocido por sacerdotes del culto afro-brasilero-Yoruba en recife, quienes consideran el rorschach test como una técnica adivinatoria, y preguntado ribeiro: si mira con ifá a través de el.
Finalmente plantea que los versos o historias de ifá son frecuentemente ambiguos, debido a
La reestructuración de un estimulo perdido para la interpretación, es un reaprovechamiento de los mejores métodos proyectivos que vienen a ser los mas legítimos, el cliente dependiendo de su propio problema, selecciona la historia que lo provee de su contesta, y que también interpreta los problemas en los caracteres mitológicos en la historia en términos de sus propias necesidades y ansiedades.
Esto tiene conexión con tres autores yorubas: j. Johnson, s. Johnson y lucas. En que el adivino permita al cliente una historía apropiada a sus problemas.
Para los que esperan que las adivinaciones le digan cual candidato saldrá en la próxima elección o cual caballo ganara en la tercera carrera, es necesario una explicación, es posible preguntar muchas cosas con la técnica de las alternativas específicas, pero no para cosas estúpidas con la intención de probar o desaprobar la efectividad del sistema de adivinación, porque la imposición le quita la razón de ser a las contestas de ifá que no deben verse para evitarse faltas que después pueden costar caro. El cliente es raramente capaz de encontrar la predicción precisa. El resultado es usualmente conocido después de algún tiempo, y cuando después del ebbo y el sacrificio es seguido de infortunio, debe de razonar, que de no haber hecho el ebbo las consecuencias podrían haber sido peores. El numero de sanciones que fallan se debe entre otras causas a la ignorancia o deshonestidad del adivino. Y como en el caso de un doctor a quien el paciente se le muere, un sinnúmero de explicaciones son posibles en donde la experiencia o conocimiento es cuestionable, la ciencia medica, no lo es para los clientes la ventaja inmediata a la solución de sus dudas sobre que acción tomo que el no ha podido decidir por el mismo entre varias alternativas.
Esto es para probar la habilidad de un adivino individual, el cliente no debe preguntar a ifá una cuestión que la respuesta es obvia, o problemas que deben resolverse usando la propia razón y conocimiento de las circunstancias. En esto ifá se asemeja a otras formas de adivinación, o al consejo de un doctor, un terapeuta, o cualquier autoridad considerada de sabiduría.
Un proverbio dice: «uno que no es has sabio, que la persona que va a consultar a ifá con el». Quiere decir entre otras cosas, que el adivino que no sabe lo que hace no debemos consultarlo, ( aki igbon ju eni-ti o mada ifá fun-eni lo).
El adivino no puede dejar de llegar al problema del cliente, a no ser que no haya aprendido las historias apropiadas. Mientras mas historias conozca del signo que salio, mas facil y directo podra llegar al mayor problema que cofronte el cliente.
Los yorubas mantienen el punto de vista, que las respuestas a todos sus problemas lo encontraran en ifá, y culpan a la ignorancia del adivino, las fallas del sistema por no haber recitado la historia correspondiente. Cuando esto pasa, la respuesta es que, el adivino no sabia lo suficiente, y para la solucion basta con consultar a otro adivino que sepa mas.
Un proverbio se refiere estrictamente al adivino que titubea. Y mira hacia arriba rememorando porque no ha aprendido lo suficiente de las historias o no puede recordar lo que dice: el que no sabe ifá mira hacia arriba, pero ifá no esta en el atico ( ai-gbo-ifá-li anwo-oke, ifá kan kosi ni para).
La interpretacion de los problemas del cliente dependen del numero y el tipo de historias que el adivino memorize del signo que salga. En ife se mantiene que un adivino debe saber no menos de 1024 historias. Antes que pueda practicar solo profesionalmente un respetable adivino de mediana edad dice conocer solo cuatro historias de cada signo, pero adivinos mas experimentados como el agbonbon, conocen ocho de cada signo. Mas historias son aprendidas de los mejis que de las combinaciones.
En igana un novato se espera que conozca no menos de dos historias de cada signo, antes que pueda adivinar solo. El araba de igana dice que conoce cuatro historias de todos los signos excepto de ejiogbe del cual conoce ochenta.
En meko un novato es examinado por los mayores, pero solo le exigen una historia por signo para pasar el examen. Dos de los principales adivinos de meko admiten que del signo:»otrupon-teure» conoce solo una historia, y de oddi-ika solo dos. Mientras mas historias conozca un adivino mas capacitado sera de resolver los problemas de sus clientes.
Un adivino no para de estudiar hasta que su aprendizaje convencional es completado y entonces comienza a practicar por su cuenta, el continuara aprendiendo nuevas historias, obras y trabajos de su instructor y de otros adivinos que le enseñaran usualmente por el pago de dinero y en efecto el periodo de estudio nunca termina y un adivino seguira aprendiendo hasta su muerte. Es agobiante, mas sin embargo el adivino gana en reputación no por las cantidades de historias que conozca o pueda memorizar, sino por el acierto y solucion para los problemas de los clientes, es lo que se dice el «ashe» de cada adivino, su reputacion y su negocio dependen de los clientes satisfechos que lo recomendaran a sus amigos y parientes.
Un adivino de ife explica que uno puede recitar 100 historias de un signo y no acertar el problema, y uno que sabe solo cuatro historias, acertar y resolver el problema, quizas porque el signo que salio sea mejor de adivinar que otro signo menos salidor, pero se difiere de esa observacion. Esta evaluacion se refiere a que ciertas historias se refieren especificamente a un solo problema, otras se refieren a una sola intereretacion, y otras son muy generales prediciendo buenas y malas fortunas, para hacer un ejemplo especifico, siete historias son repetidas por un adivino de ife del signo «iwori meji», el primero se refiere a un viaje que es lo mas general en este signo, teniendo el refran, «ifá dice que no dejara que veamos lo diabolico en las cosas que adivinemos». La segunda dice «ifá dice que ve bendiciones en visitantes dinero, hijos y un titulo». La tercera habla de dos cosas o problemas, refirlendose a algo que ha sido perdido, y de alguien que se convertira en jefe. La cuarta se refiere a alguien que piensa dar un viaje.
La quinta de alguien que tiene problemas con sus parientes o familia, que no lo dejan tener su casa propiedades o paz. La sexta se refiere a tres hijos de una misma madre, de los cuales el mas joven esta enfermo o tiene problemas porque es muy rebelde. Y la ultima se refiere a un grupo de seis parientes, donde uno esta enfermo o todos y donde uno morira.